Economía colaborativa (o Sharing economy) consiste en un grupo de intercambios o transacciones que son realizados de persona a persona, en lugar de empresa a persona.

Son muchas ventajas de este modelo de economía colaborativa (CC) para los negocios. Algunas de las más importantes son:

  1. El ahorro, ya que la mayoría de los productos o servicios que se ofrecen a través de este sistema tiene precios menores a los del mercado tradicional, por la eliminación de costos transaccionales.
  2. Desarrollo sustentable, porque la CC estimula el uso en forma más continua de los productos. Lo que alguien ya no necesita, puede tener un nuevo destinatario en alguna red de sus contactos.

Ejemplo de esto es una de las variantes más innovadoras que nació en España: el crowdfarming, una manera muy singular de invertir en producción agrícola sin siquiera pisar una granja. Hoy, en naranjasdelcarmen.com explican los principios que sostienen su trabajo: “Queremos producir lo que realmente se vaya a consumir. Nos gusta trabajar sabiendo que hay alguien que espera pacientemente la cosecha que cultivamos. Somos conscientes de que existen personas que se interesan por lo que comen y demandan tener más información sobre su comida: de dónde viene, cuándo ha sido recolectada, quién y cómo la ha cultivado. La relación directa, la relación transparente entre agricultor y consumidor es clave si queremos producir calidad y evitar el desperdicio de alimentos”.

  1. Manejo de recursos. Otro principio de la economía colaborativa es que, si a alguien sirve una cosa, lo más probable es que a otra persona también. En Francia ya hay más de 1000 agricultores con un perfil en la plataforma que pueden establecer contactos entre ellos para intercambiar máquinas agrícolas que van desde tractores hasta máquinas sembradoras.

La mayor parte de toda esta maquinaria pasa mucho tiempo en los galpones sin ser usadas por nadie. Esto hace que la amortización de muchas de estas máquinas no se consiga en menos de 10 años. Y como los costos de la mecanización, en muchas granjas llegan hasta un 40% de la cifra de negocio, terminan asfixiando a estos agricultores. Además, muchas máquinas imprescindibles para la actividad agrícola sólo se usan una vez al año y por ello el periodo de amortización se hace muy largo. Lo mismo ocurre en Uruguay (http://rentar.com.uy/), donde el objetivo es formar una «comunidad de usuarios», integrada por arrendatarios que a su vez puedan ser arrendadores, y arrendadores que también puedan demandar maquinarias.

En Argentina, recientemente se lanzó OpenAg, donde según Jai Shroff, CEO global de la compañía UPL…” Entendemos a la cadena de valor agrícola no como un concepto lineal, sino como una red compleja con diferentes actores, interrelaciones y comunicaciones entre diferentes sectores. Este término para nosotros engloba el concepto del trabajo en red y en colaboración”

-Entendemos a la cadena de valor agrícola no como un concepto lineal, sino como una red compleja con diferentes actores, interrelaciones y comunicaciones entre diferentes sectores. Este término para nosotros engloba el concepto del trabajo en red y en colaboración

  1. Mayor oferta. Los productos con un segundo uso y los servicios compartidos amplían la oferta de los mercados tradicionales. Sin la economía colaborativa, es posible que éstos nunca vieran la luz. En Cataluña, existe una plataforma con un modelo de gestión de suelo agrícola que básicamente consiste en poner en contacto a propietarios de tierras en desuso con personas que quieran llevar a cabo una actividad agrícola en ellas.
  2. Beneficio medioambiental. La reutilización y los servicios compartidos son una buena manera de contribuir al cuidado y la sostenibilidad de los entornos. Un ejemplo es los sistemas que a nivel mundial hay sobre recolección y reutilización de envases vacíos, donde para cada generador sería económicamente imposible tener su propio sistema de gestión.
  3. Comunicación directa ya que en el uso de servicios que se basan en los principios de la economía colaborativa, no existen intermediarios entre las dos personas involucradas o entre un grupo de personas, o bien se minimizan. Más allá de que el contacto se haga por medio de una página web o aplicación, es necesario destacar lo personal que es el intercambio de información.

Desventajas de la economía colaborativa

  1. Seguridad limitada: Si bien las ventajas de trabajar persona a persona son notables, la falta de seguridad es un tema para cuidar si no se construye una base de confianza.
  2. Trabajos alejados de lo convencional: como el ejemplo de intercambio de trabajo por alojamiento. Es una opción en algunas plataformas, pero no siempre es bien regulada.
  3. Dependencia de la tecnología ya que será la capacidad del teléfono móvil del que se disponga o la estabilidad del proveedor de servicios, lo que determinarán la velocidad de la relación y negocio resultante.
  4. La reputación es lo más importante. Tanto desde el oferente como hasta el demandante se de suma importancia la seguridad, permanencia en el tiempo y transparencia. En los casos de provisión de insumos, respetar lo acordado y dar una trazabilidad acorde es fundamental, y protege de un solo mal comentario que da por tierra con esta reputación.
  5. La economía colaborativa puede conducir a que la mayoría de estos datos/información quede en manos de las propias empresas que la generan (por ejemplo, la información de tráfico   que pueden generar los taxis actualmente regulados). Se dey se deben instrumentar mecanismos que corrijan este problema potencial,

 

Ramiro Oviedo Bustos

roviedobustos@gmail.com

Guillermo F. Devereux

liamfdevereux@gmail.com